Una circulación adecuada es clave para mantener una salud óptima. Asegura que la sangre y el oxígeno fluyan continuamente por todo el cuerpo, permitiendo que cada órgano funcione correctamente. También ayuda a curar las heridas más rápidamente, mantiene el cerebro agudo, el corazón sano e incluso da a la tez un rubor natural.
En una época en la que el resfriado, la gripe y el COVID-19 son frecuentes, es especialmente importante asegurarse de que nuestra circulación está a la altura de las circunstancias. Sin embargo, hay ciertas condiciones que pueden dificultar el mantenimiento de una circulación adecuada.
Si crees que puedes tener mala circulación, presta atención a cualquiera de los siguientes síntomas:
- Falta de energía o concentración
- Extremidades frías (manos y pies)
- Adelgazamiento o caída del cabello
- Retraso o lentitud en la curación debido a un sistema inmunitario debilitado
- En los hombres, disfunción eréctil
La buena noticia es que hay varias cosas que puedes hacer para que tu sangre fluya. Prueba alguna de las siguientes:
Aumenta el ejercicio cardiovascular
Correr, montar en bicicleta o caminar puede ayudar a estimular la circulación, y lo mismo ocurre con los estiramientos antes y después del ejercicio.
Si fumas, intenta dejarlo o reduce el consumo. Fumar puede inhibir el flujo sanguíneo, destruir las paredes de los vasos sanguíneos y provocar la acumulación de placa en las venas.
Si tienes anemia, toma suplementos de hierro o come alimentos ricos en hierro
Cuando tienes un nivel bajo de hierro (o anemia), no tienes suficientes glóbulos rojos para hacer circular el oxígeno por todo el cuerpo. Habla con tu médico para ver si un suplemento de hierro es adecuado para ti, o incorpora a tu dieta espinacas, legumbres y carnes rojas ricas en hierro (siempre con moderación).
Cepilla tu cuerpo en seco
Antes de la ducha o el baño, prueba esta técnica para estimular el flujo sanguíneo: con un cepillo de cerdas suaves, cepilla suavemente tu piel con movimientos largos y ascendentes. Asegúrate de empezar por los pies y subir hasta el corazón.
Incluye más ácidos grasos omega-3 en tu dieta
Pescados como el atún, el salmón y las sardinas pueden ayudar a mejorar el flujo sanguíneo y son excelentes para la salud del corazón. Intenta comerlos de dos a tres veces por semana.
Usa medias de compresión y eleva las piernas
Elevar las piernas ayudará a trasladar la sangre a la parte superior del cuerpo. Por su parte las medias de compresión ejercen presión sobre los pies para ayudar a los vasos sanguíneos a impulsar la sangre a través del cuerpo hasta el corazón.
También pueden ayudar a reducir la hinchazón y pueden ser beneficiosos para las mujeres embarazadas, las que tienen diabetes o las que están de pie todo el día.
¡Esto es todo! Si quieres más consejos sobre cómo mejorar la circulación pásate por nuestra farmacia y te atenderemos encantados 🙂