La terapia de linfocitos T con CAR, también llamada CAR-T, acrónimo del inglés chimeric antigen receptor (CAR) T-cell therapyes, es un tipo de inmunoterapia que se emplea en el tratamiento del cáncer.
La técnica consiste en retirar de la sangre del paciente varios millones de linfocitos T, manipularlos genéticamente y replicarlos en el laboratorio para posteriormente volvérselos a administrar al paciente mediante infusión en vena. Es un procedimiento muy costoso que se ha aplicado como terapia a algunos tipos de leucemia. La denominación del método hace referencia a las siglas CAR (receptor de antígeno quimérico).
Sin embargo el método, que ha sido probado en humanos y está pendiente de ser comercializado en Estados Unidos por el laboratorio Novartis, resulta prometedor a la vista de fuentes farmacéuticas. El presidente del Consejo General de Colegios Farmacéuticos, Jesús Aguilar ha destacado la importancia del estas terapias CART, medicamentos que suponen un cambio «disruptivo».