¡Llega la primavera y con ella la temida astenia primaveral!
Esta se da en el cambio de estación, cuando pasamos del invierno a la primavera. Es una situación de desórdenes en el mecanismo fisiológico normal como causa de la adaptación del cuerpo a las condiciones propias de la nueva estación: incremento de las horas de luz, temperaturas más cálidas y agradables.
La astenia puede provocar sensación de fatiga física y mental, lo que hace que nos sintamos más cansados y apáticos de lo normal, pudiendo sentir también irritabilidad, tristeza, desánimo, dolor de cabeza y malestar general.
Por suerte, estos síntomas son leves y temporales, y podemos ayudar a nuestros pacientes a combatirlos mediante la transmisión de hábitos saludables para ayudar a nuestro organismo a fortalecer cuerpo y mente.
Consejos para el paciente:
- Dormir las horas necesarias: Es importante respetar las horas de sueño para recuperarnos del cansancio experimentado a lo largo del día.
- Practicar ejercicio: Éste ayuda a liberar tensiones, a mantenernos vitales y a promover la producción de endorfinas que mejoran el estado de ánimo. Además gracias al desgaste de energía, el deporte nos ayuda a facilitar el descanso nocturno.
- Llevar una dieta sana, equilibrada y que incluya productos energéticos: dátiles, frutos secos, plátanos, legumbres, pastas, chocolate.
Recordamos que conviene realizar 5 comidas al día para conservar la energía, un tentempié a media mañana, una comida fuerte, una merienda suave y una cena ligera.
- Tomar algún complemento alimenticio o suplemento vitamínico: esto es recomendable para las personas que incluso con los consejos previos mencionados, sigan necesitando un extra de energía.
- Oligoelementos: Cobre, fósforo, hierro y manganeso.
- Vitaminas: Las del grupo B mejoran la utilización de energía cerebral.
- Jalea real: Actúa como estimulante, tonificante y euforizante.
- Levadura de cerveza: Contiene vitaminas del grupo B.
- Polen: Tiene propiedades equilibrantes, vigorizantes y energéticas.
- Otros complementos fitoterápicos: Como guaraná, ginseng y jengibre.
Desde su propia farmacia le pueden recomendar el suplemento que mejor se adecúe a cada persona.